Sargento 1 de infantería  retirado con TEP (trastorno de estrés postraumatico) diagnosticado en 2004. A lo largo de éstos doce años han sido muchos los psicólogos y psiquiatras que han intentado ayudarme sin éxito a encajar en una sociedad que, por desgracia, no está  preparada para convivir con personas con este trastorno o al revés,  es decir, nosotros no sabemos como encajar en esta sociedad. Los profesionales visitados tampoco están  familiarizados con esta enfermedad no siendo el caso del psicólogo  D. Abel García Contreras que ha sido el único que de verdad me ha ayudado con su tratamiento EMDR al mismo tiempo que posee una gran experiencia entre el colectivo de fuerzas de seguridad

Sargento 1º de Infanteria, retirado

Con tu buen hacer y profesionalidad unido a tu calidad como persona, gracias Abel por la inestimable ayuda que nos prestas. Un abrazo.

Paciente de Córdoba

Después de un largo periplo por diferentes especialistas, y tras varios años de retroceso en mi enfermedad, me puse en manos de Abel.

Lo que lo diferencia de un gran profesional, atento y cercano, es que además conoce perfectamente la idiosincrasia de la Guardia Civil, por lo que además de ayudarme para recuperar mi salud mental, me asesoraba sobre las distintas fases y posibles resultados, por los que iba a pasar respecto de mi situación laboral. Esto restaba incertidumbre en gran medida.

Muchas gracias por todo.

Los otros profesionales consultados tampoco están  familiarizados con esta enfermedad no siendo el caso del psicólogo  D. Abel García Contreras que ha sido el único que de verdad me ha ayudado con su tratamiento EMDR al mismo tiempo que posee una gran experiencia entre el colectivo de fuerzas de seguridad

Guardia Civil , retirado

Mi agradecimiento y el de mi familia al psicólogo clinico y forense Abel S. Garcia , por su estimable ayuda recibida durante mas de seis años de terapia recibida para lograr  superar las secuelas y daños sufridos.

Su incansable apoyo, asesoramiento y nuevas tecnicas profesionales utilizadas, ademas de sus informes periciales emitidos para la Valoración discapacidad en la Junta de Andalucia, Junta Médico Pericial, Expediente perdida de condiciones psicofisicas, Juzgado central de lo Contencioso, Reclamación patrimonial del estado etc.

Muchas gracias, ya que nos has ayudado al igual que a muchisimos compañeros/as a divisar la luz al final del tunel, ante situaciones sobrevenidas, injustas e inesperadas que por desgracia nos ha tocado vivir en nuestro trabajó y cambiar el chip y reinventarnos en la otra vida que es la Civil y apoyandonos en nuestras  familias seguir viviendo la vida e incluso poder seguir trabajando en sectores de ayuda a los demás  como es mi caso.

Cabo 1° Guardia Civil Retirado en Acto de Servicio por Mobbing , residente en Jaén.

En septiembre de 2006, tras mantener una fuerte discusión con el  Alférez Comandante de Puesto, estando de servicio, fui al centro de salud de Martos, donde fui  atendido por el médico de guardia. De un cuadro agudo de ansiedad,  a continuación entregué el correspondiente parte de baja psicológica. Comenzando a partir de ese día un calvario, tanto en lo profesional como en la vida privada. Conforme pasa el tiempo tus compañeros empiezan a criticarte, y a retirarte el saludo. Tu familia no entiende la baja  psicológica, hablando que estas de baja por loco, los vecinos tampoco entiende que un Guardia Civil se dé de baja psicológica.

            Con lo que te ves muy sólo, y sin ningún tipo de ayuda. Al contrario en el caso del Puesto de Martos, al ser varios los componentes de baja psicológica, que coinciden a la vez, sufrimos acoso por parte del mando, amenazas verbales y toda clase de humillaciones por parte del Alférez Comandante de Puesto. Como consecuencia, había dos compañeros  naturales de Martos como yo, que éramos amigos antes de entrar en la Guardia Civil. Y solíamos salir en pareja. Debido a todo esto cortaron la relación de amistad, de forma radical. Lo que mi mujer nunca entendió.

            Al principio, estuve en tratamiento de psicoterapia, con otro psicólogo, el cual  no atendía los problemas personales y  profesionales que padecía,  de manera profesional, siendo la consulta como un mero trámite para firmarle la sesión. Para poder cobrar de la compañía médica. Motivo por el que lo dejé, estando hundido, no importándome lo que me pudiera suceder, y lo que dijera el psicólogo de la Guardia Civil.

            Cuando otro compañero del Puesto de Martos, también de baja psicológica, tuvo conocimiento de mi situación. Me aconsejó que fuera a ver al psicólogo ABEL GARCIA CONTRERAS,  puesto en contacto con el citado Abel, acudí a la primera cita, sin fe y creyendo que no serviría para nada. Hoy puedo dar fe que ha sido mi salvación, y que gracias a él puedo disfrutar de mi esposa e hijos. Pues la idea del suicidio se había instalado en mi cabeza  y era como una voz interior que no te deja.  Lo único que me decía a mí mismo, era que cuando dispusiera el suicidio, antes me llevaría al Alférez conmigo. Cosa que ya tenía preparada, pues el citado Alférez todos los días, a las dos recogía a sus dos hijos en el colegio.  Lo abordaría  y le cortaría el cuello, tenía el cuchillo preparado y a continuación me suicidaría.

            Gracias a Abel, comprendí que tenía un problema, y siempre estuvo de mi parte, ayudándome de una forma muy profesional, siendo un pilar importante para mi curación el otro pilar fue mi mujer, que siempre venía a la consulta.

            Cuando te encuentras  en esta situación, lo ves todo negro y no ves la salida, tus compañeros y familia no se dan cuenta del problema real que padeces, por lo que la ayuda de un buen profesional, puede salvar una vida. Por eso estoy agradecido a Abel, al que considero hoy un amigo. Sin obviar la experiencia que tiene,  en todo lo relacionado con las bajas psicológicas  en el ámbito de la Guardia Civil.

Guardia Civil en situación de retirado. Último destino en activo, Puesto Principal de Martos (Jaén)

Hace unos años sufrí un atropello en acto de servicio, que me ha obligado a entrar en el quirófano varias veces para intentar minimizar el daño físico que me produjo.

Durante los primeros meses tras el accidente, no quise darle importancia a mi sufrimiento psicológico, creía que era algo normal debido a la fuerte experiencia de haber estado al borde de la muerte. Creía que el tiempo iría estabilizando mi estado de ánimo y que la ansiedad desaparecería. Nada más lejos de la realidad. Mi sufrimiento no sólo no disminuía, sino que cada vez era mayor. Llegó un momento en el que no me reconocía a mí mismo, mi vida había cambiado y el accidente había podido conmigo, entonces decidí buscar ayuda psicológica porque yo solo no podía con este amargo cambio.

Pregunté a varios compañeros destinados en diferentes provincias y distintas especialidades y cuál fue mi sorpresa que todos me recomendaron que pidiese ayuda a la misma persona, a Abel.

A día de hoy puedo decir que Abel me ha enseñado a integrar el grave accidente y mis lesiones en mi vida. Ojalá le hubiese pedido ayuda antes. Ha sido capaz de poner tranquilidad donde antes sufría ansiedad y de iluminar lo que antes veía oscuro.

Además de un gran profesional, con enorme experiencia en casos relacionados con guardias civiles, es una excelente persona. Desde el primer momento te sientes cómodo con él, es muy atento, parece como si lo conocieses de toda la vida.

Sólo tengo palabras de agradecimiento hacia Abel, por haberme dado soluciones a lo que yo creía que era irreversible.

Diagnosticado de :

-Trastorno de Estrés Postraumático

-Trastorno Depresivo Mayor

Guardia Civil (especialidad de Tráfico)